Cientos de migrantes han cruzado la frontera entre México y Estados Unidos, en el temor de que las nuevas políticas les dificulten aún más la entrada al país. Esto sucedió horas antes de que expiraran las restricciones de asilo relacionadas con la pandemia, impuestas por el llamado Título 42. El gobierno del presidente Joe Biden ha anunciado medidas para reemplazar este programa, el cual suspendió los derechos de solicitar asilo en marzo de 2020 para prevenir la propagación de COVID-19. El Título 42 expiró el jueves.
En un intento por descongestionar las instalaciones de detención, los agentes de la Patrulla Fronteriza recibieron la orden de liberar a algunos migrantes con la instrucción de presentarse en una oficina de inmigración en Estados Unidos dentro de un plazo de 60 días. Este anuncio fue proporcionado por un funcionario estadounidense que prefirió mantener su anonimato. El Departamento de Seguridad Nacional anunció una nueva regla que dificultará la obtención de asilo para cualquier persona que haya viajado por otro país, como México. También se han introducido toques de queda con seguimiento por GPS para las familias que son puestas en libertad en Estados Unidos antes de sus evaluaciones iniciales para un posible asilo.
En la ciudad mexicana de Matamoros, al otro lado de Brownsville, en Texas, se vieron migrantes llegando constantemente el miércoles. Ellos se desnudaban antes de descender por una orilla empinada con sus ropas dentro de bolsas de plástico y se adentraban lentamente en el río, incluso un hombre que llevaba una maleta abierta sobre la cabeza en la cual llevaba a un bebé. Ya en la ribera estadounidense, se ponían ropa seca y se abrían paso a través de las vallas de alambre de cuchillas. Muchos se entregaron a las autoridades, con la esperanza de ser liberados legalmente en suelo norteamericano mientras tramitan sus casos ante los tribunales de inmigración, que actualmente están abrumados y podrían tardar años en resolver sus casos.
Uno de los migrantes que cruzó, un venezolano que se identificó como William Contreras, dijo que el Título 42 fue favorable para los venezolanos y que muchos de sus compatriotas fueron liberados antes que él en Estados Unidos. Según un funcionario estadounidense que habló bajo condición de anonimato, la Patrulla Fronteriza detuvo a unos 10.000 migrantes el martes, uno de los días de mayor actividad de su historia. Esta cifra casi duplica la media diaria de unos 5.200 en marzo, los últimos datos disponibles públicamente. Las autoridades estadounidenses han pronosticado que podrían enfrentar una oleada de hasta 11.000 migrantes con el fin del Título 42.
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— Noticias al día Perú (@NAD_pe) May 11, 2023
